I. LA BONDAD ORIGINAL DEL DISEÑO HUMANO
- Dios declara su creación “buena en gran manera” (Génesis 1:31).
- Esto incluye el diseño humano completo, con libre albedrío, capacidad moral, y sujeción a ley.
Y Dios no se equivoca.
El libre albedrío no es el “defecto del sistema”, es parte esencial del diseño a imagen de Dios.
II. EL FRACASO DE UN INDIVIDUO NO INVALIDA LA ESPECIE
- El fracaso de Adán no cancela la validez del diseño (FORMA) HOMBRE.
- Dios no renuncia al modelo. Decide salvar, y lo hace sin cambiar el diseño base.
III. LA DEBILIDAD DE LA LEY
- La ley es santa, justa y buena (Rom. 7:12).
- Pero es débil frente al libre albedrío porque aunque puede instruir, no puede transformar ni forzar obediencia.
- Esta debilidad es crítica en un escenario de eternidad. Una eternidad sostenida solo por ley y libertad termina inevitablemente en una caída.
- Ley perfecta + Libre albedrío real = posibilidad de amor genuino.
- Pero también = posibilidad de rebelión eterna.
IV. EL RIESGO DE AMAR LIBREMENTE EN LA ETERNIDAD
- Dios, siendo amor, se expone a la pérdida.
- Pero también es justicia perfecta, y no puede ignorar el mal ni tolerar eternamente lo corrupto.
¿Cómo tener una creación eterna, libre, amada, y sin riesgo de corrupción futura?
V. LA SOLUCIÓN: JESUCRISTO COMO FUNDAMENTO DE UNA NUEVA ESTABILIDAD
- Jesús no es solo el Salvador del hombre, es la solución estructural de Dios al problema de la ley y el libre albedrío.
- Jesús no solo paga una deuda: crea un nuevo fundamento de justicia, superior a la ley, basado en obediencia voluntaria perfecta, sellada en muerte, y certificada en resurrección.
Donde la ley instruía, Jesús cumple.
Donde la ley no podía forzar, Jesús vence por amor.
SÍNTESIS TEOLÓGICA
- Dios no abandona su diseño.
- Pero modifica el sistema de sostenimiento de la vida eterna:
- Ya no será por obediencia libre sostenida bajo ley.
- Será por una justicia cumplida, en un nuevo hombre perfecto.