1. El matrimonio es el pacto, no la unión física
Base bíblica:
Génesis 2:24: “Por tanto, dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y serán una sola carne.”
El orden natural del texto es:
La expresión “su mujer” ya presupone la existencia del pacto matrimonial antes de la unión sexual.
Por eso Adán llama “mujer” a Eva antes de unirse carnalmente con ella (Gén. 2:23).
Conclusión:
El matrimonio es primero un pacto voluntario y consciente de exclusividad y entrega mutua.
La sexualidad es la expresión legítima de ese pacto, pero no su causa.
2. El sexo no constituye matrimonio automáticamente
1 Corintios 6:16:
“¿No sabéis que el que se une con una ramera es un cuerpo con ella? Porque dice: Los dos serán una sola carne.”
Pablo cita Génesis 2:24 pero no dice que ese acto constituye matrimonio, sino que es una unión carnal fuera del pacto.
Si el sexo creara automáticamente un matrimonio, entonces el fornicario estaría casado con una ramera, lo cual es absurdo.
También en Éxodo 22:16, si un hombre fornicaba con una virgen, debía ofrecerse a casarse con ella, lo que muestra que el sexo no hacía el matrimonio.
3. ¿Qué pasa si no hay unión física aún?
Supongamos que “Celebro el pacto con una mujer, pero por motivos externos postergamos el vivir juntos y la consumación...”
Bíblicamente, ella ya es mi esposa.
Así como María estaba desposada con José (Lucas 1:27) antes de conocerlo carnalmente, y ya era llamada “su mujer” (Mateo 1:20), así también el matrimonio existe desde el pacto, no desde la consumación.
El pacto crea la relación.
La unión sexual es parte de esa relación, pero no la origina ni crea.
Conclusión
Tu esposa es tu esposa desde el pacto, y no desde el momento en que “la conoces carnalmente”. No es necesario consumar la unión para que el matrimonio sea válido.
Base bíblica:
Génesis 2:24: “Por tanto, dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y serán una sola carne.”
El orden natural del texto es:
- Dejará (independencia)
- Se unirá a su mujer (pacto de compromiso)
- Serán una sola carne (unión sexual)
La expresión “su mujer” ya presupone la existencia del pacto matrimonial antes de la unión sexual.
Por eso Adán llama “mujer” a Eva antes de unirse carnalmente con ella (Gén. 2:23).
Conclusión:
El matrimonio es primero un pacto voluntario y consciente de exclusividad y entrega mutua.
La sexualidad es la expresión legítima de ese pacto, pero no su causa.
2. El sexo no constituye matrimonio automáticamente
1 Corintios 6:16:
“¿No sabéis que el que se une con una ramera es un cuerpo con ella? Porque dice: Los dos serán una sola carne.”
Pablo cita Génesis 2:24 pero no dice que ese acto constituye matrimonio, sino que es una unión carnal fuera del pacto.
Si el sexo creara automáticamente un matrimonio, entonces el fornicario estaría casado con una ramera, lo cual es absurdo.
También en Éxodo 22:16, si un hombre fornicaba con una virgen, debía ofrecerse a casarse con ella, lo que muestra que el sexo no hacía el matrimonio.
3. ¿Qué pasa si no hay unión física aún?
Supongamos que “Celebro el pacto con una mujer, pero por motivos externos postergamos el vivir juntos y la consumación...”
Bíblicamente, ella ya es mi esposa.
Así como María estaba desposada con José (Lucas 1:27) antes de conocerlo carnalmente, y ya era llamada “su mujer” (Mateo 1:20), así también el matrimonio existe desde el pacto, no desde la consumación.
El pacto crea la relación.
La unión sexual es parte de esa relación, pero no la origina ni crea.
Conclusión
Aspecto | Esencial para el matrimonio | Explicación |
Pacto de unión voluntaria | ![]() | Es el acto fundante del matrimonio |
Unión sexual | ![]() | Expresión física legítima del pacto matrimonial |
Convivencia inmediata | ![]() | Puede ser diferida sin invalidar el matrimonio |