A modo de resumen, y para consolidar lo que les vengo presentando hasta ahora, recapitulemos las ideas centrales pero aplicándolas a lo que las Escrituras nos revelan sobre la creación del hombre:
El aparente conflicto entre "crear" al Hombre en Génesis 1 y "formar" al hombre en Génesis 2 se resuelve cuando entendemos la diferencia fundamental entre el DISEÑO y el OBJETO FÍSICO.
1. Primero, la "Forma" (El diseño): En Génesis 1, Dios CREA al "Hombre" como diseño.
Esto se refiere a la concepción del Molde o la Forma de una nueva especie de vida. No es un individuo, sino el plano maestro, la idea inteligente de lo que significa ser humano.
2. Segundo, la "Sustancia" (La materia prima): Para la primera INSTANCIA de este diseño, Dios elige como materia prima o SUSTANCIA: el "polvo de la tierra".
3. Tercero, la "Sustancia formada" (El objeto moldeado): En Génesis 2, Dios FORMA esta SUSTANCIA (el polvo) de acuerdo a la FORMA previamente creada.
Y el resultado es la SUSTANCIA FORMADA: Adán mismo pero aún sin vida.
Para ilustrarlo, usamos la analogía del cuchillo de plástico:
* La Forma es la idea de "cuchillo", un diseño inteligente cuya función es cortar.
* La Sustancia es el plástico.
* La Sustancia formada es el objeto final, el "cuchillo de plástico".
Este simple ejemplo nos enseña dos verdades fundamentales:
* La inteligencia y la función residen en la FORMA (el diseño), no en la SUSTANCIA (el material). El plástico por sí solo no corta; es el diseño de cuchillo impreso en él lo que le da su propósito y funcionalidad.
* El Molde se retira. El cuchillo final es 100% plástico; no contiene partes del molde. De la misma manera, la FORMA de Hombre es el diseño que se le aplica al polvo, pero el cuerpo resultante es 100% "polvo formado", no una mezcla de polvo y "algo más".
Conclusión: Adán, como primera INSTANCIA de la humanidad, no es un alma preexistente que "encarna" en un cuerpo.
Es el resultado de una SUSTANCIA terrenal que fue organizada según una FORMA divina y luego activada por la ANIMACIÓN del aliento de vida.
Entender este modelo para el primer Adán va a ser la llave indispensable para comprender la naturaleza del Segundo.
El aparente conflicto entre "crear" al Hombre en Génesis 1 y "formar" al hombre en Génesis 2 se resuelve cuando entendemos la diferencia fundamental entre el DISEÑO y el OBJETO FÍSICO.
1. Primero, la "Forma" (El diseño): En Génesis 1, Dios CREA al "Hombre" como diseño.
Esto se refiere a la concepción del Molde o la Forma de una nueva especie de vida. No es un individuo, sino el plano maestro, la idea inteligente de lo que significa ser humano.
2. Segundo, la "Sustancia" (La materia prima): Para la primera INSTANCIA de este diseño, Dios elige como materia prima o SUSTANCIA: el "polvo de la tierra".
3. Tercero, la "Sustancia formada" (El objeto moldeado): En Génesis 2, Dios FORMA esta SUSTANCIA (el polvo) de acuerdo a la FORMA previamente creada.
Y el resultado es la SUSTANCIA FORMADA: Adán mismo pero aún sin vida.
Para ilustrarlo, usamos la analogía del cuchillo de plástico:
* La Forma es la idea de "cuchillo", un diseño inteligente cuya función es cortar.
* La Sustancia es el plástico.
* La Sustancia formada es el objeto final, el "cuchillo de plástico".
Este simple ejemplo nos enseña dos verdades fundamentales:
* La inteligencia y la función residen en la FORMA (el diseño), no en la SUSTANCIA (el material). El plástico por sí solo no corta; es el diseño de cuchillo impreso en él lo que le da su propósito y funcionalidad.
* El Molde se retira. El cuchillo final es 100% plástico; no contiene partes del molde. De la misma manera, la FORMA de Hombre es el diseño que se le aplica al polvo, pero el cuerpo resultante es 100% "polvo formado", no una mezcla de polvo y "algo más".
Conclusión: Adán, como primera INSTANCIA de la humanidad, no es un alma preexistente que "encarna" en un cuerpo.
Es el resultado de una SUSTANCIA terrenal que fue organizada según una FORMA divina y luego activada por la ANIMACIÓN del aliento de vida.
Entender este modelo para el primer Adán va a ser la llave indispensable para comprender la naturaleza del Segundo.